La oposición se felicitó ayer por la detención, el pasado lunes en Algemesí, de un presunto integrante de ETA, pero aludió al 'factor suerte' y criticó la política del Gobierno en materia de seguridad ciudadana. Socialistas y Esquerra Unida pidieron al Ejecutivo que 'garantice' el derecho constitucional de los ciudadanos a la seguridad y achacaron los 'elevados índices de delincuencia' a la 'dejación de responsabilidades' del Gobierno.
El secretario general de los socialistas valencianos, Joan Ignasi Pla, habló ayer en Castellón de la inseguridad ciudadana, tanto en su comparecencia ante los medios de comunicación como en el encuentro con militantes y simpatizantes que organizó el partido con motivo de la visita del secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero. Pla achacó al Gobierno valenciano los 'elevados índices de delincuencia' por su 'dejación de responsabilidades' y por su falta de 'acción política y de políticas de prevención entre los colectivos marginados', según informa María Fabra.
La Comunidad Valenciana tiene los menores niveles de atención a excluidos, aseguró Pla, quien mantuvo que inmigración y delincuencia no están unidos, sino que son 'la desidia y el abandono' de la Administración hacia los inmigrantes las que provocan, en algunos casos, 'la necesidad de delinquir'.
Por su parte, el coordinador general de Esquerra Unida (EU), Joan Ribó, hizo una llamamiento al Gobierno central para que 'garantice' la seguridad ciudadana en la Comunidad Valenciana 'en los temas relacionados con el terrorismo y con el incremento de la delincuencia'. 'La seguridad es un derecho constitucional y corresponde al Estado garantizarla, aunque por desgracia esto no sea así en casos como el de Alicante, donde no se ha permitido una manifestación por no disponer de los suficientes agentes de policía para protegerla', dijo Ribó. Según el dirigente de EU, 'la falta de recursos policiales no sólo significa una mayor inseguridad en la ciudadanía, sino que, como se ve en este caso, la escasez de policías impide que se ejerzan otros derechos como el de manifestarse pacíficamente'.
Ribó se congratuló por la detención de un presunto etarra en Algemesí, pero indicó que, en su opinión, fue determinante el 'factor suerte'. Ribó dijo que hay que felicitar a la policía de proximidad por su actuación y agradecer la colaboración ciudadana, 'que ha sido decisiva en este caso', pero indicó que ha sido importante el factor suerte.
A este respecto, el delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, afirmó ayer en Torrevieja que, tras la detención del presunto terrorista Aitzol Maurtúa Eguren, la posibilidad de que exista un comando de ETA establecido en la Comunidad Valenciana 'queda desmantelada'. 'Estabilidad de un comando no tenemos constancia de que exista', añadió Camps, quien recalcó que Maurtúa y su compañero huido formaban un 'comando informativo'. El delegado negó que la detención del etarra se produjera 'por un cúmulo de casualidades', sino gracias a contar 'cada vez con una policía más experta y eficaz', así como por la colaboración ciudadana. Y recordó que las 'medidas de seguridad están siempre tomadas desde hace mucho años, y de este esfuerzo ha sido posible que el agente de Policía de Proximidad se percatara de que estaba pasando algo' con el vehículo'.
Bandas desarticuladas
Por otra parte, el subdelegado del Gobierno en Alicante, Luis Garrido, aseguró ayer, durante la presentación de una nueva unidad de la Guardia Civil de Tráfico en Torrevieja a la que asistió junto a su superior inmediato, el delegado Francisco Camps, que en lo que va de año han sido desarticuladas en la comarca de la Vega Baja, al sur de la provincia de Alicante, 42 organizaciones delictivas. Garrido consideró 'lógico' que las redes de delincuentes elijan esta comarca para desplegar su actividad ilícita al tratarse de un área 'de gran riqueza, calidad de vida y muchas viviendas'. El subdelegado del Gobierno manifestó que los últimos datos pronostican que la actividad delictiva experimentará 'una línea descendente' en los próximos meses y auguró que este verano 'será bastante mejor' que el de 2001.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de junio de 2002