Un juez archiva la ablación de cuatro hermanas porque se hizo en el extranjero. Según nuestras leyes, nuestras hijas pueden ser mutiladas siempre que este hecho no tenga lugar en territorio español.
Me pregunto si también miraríamos para otro lado si, después de regresar de un viaje, una chica de 14 años apareciera sin una mano, por ejemplo. Y si la situación fuera de cuatro hermanos que han vuelto sin sus atributos sexuales, ¿cuál sería la reacción de los jueces y de la sociedad española?
Exijo que, al menos el Defensor del Pueblo, tome cartas en este asunto. Las mujeres de color también forman parte de él.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de junio de 2002