El III Encuentro Iberoamericano del Cortometraje, que se celebra hasta fin de mes en la Casa de América (paseo de Recoletos, 2), mira este año a la realidad social. La brasileña Katia Lund presenta Golden Gate, historia de dos niños de favela que consiguen dinero trabajando para los camellos. Rodrigo Moreno, de Argentina, presenta Compañeros, donde un electricista conoce el fanatismo de los militantes en un acto político de barrio. Los tripulantes, del chileno Daniel Henríquez, retrata a los marineros de un barco que tienen diferentes puntos de vista antes las noticias de un golpe de Estado en su país. El corto cubano Talco para lo negro, de Arturo Sotto, reflexiona sobre el poder, y el español Mar de cemento, de Luis Ángel Ramírez, aborda la vida de un ex boxeador que recoge a inmigrantes sin papeles en su furgoneta.
Los cortometrajes se proyectan a las 18.30 y a las 20.30, con entrada a 2 euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 13 de junio de 2002