El comité de empresa de las minas de Sallent-Balsareny considera que se deben incrementar las medidas de seguridad en el interior de las galerías de esta explotación con la finalidad de evitar accidentes como el que el pasado miércoles costó la vida a José Luis Roldán de la Corte, un minero de 46 años, casado y con tres hijos, que quedó aplastado por una mole de piedra potásica de casi una tonelada de peso desprendida en una galería que está en explotación.
El accidente mortal llegó en un momento en el que el debate sobre la seguridad en el interior de las minas es un asunto candente. Desde los sindicatos se opina que la entrada del grupo israelí Dead Sea World en el control de la firma potásica ha supuesto un retroceso en la seguridad. Los miembros del comité de empresa han denunciado el incumplimiento de las medidas de seguridad que se habían establecido en el pacto industrial firmado en octubre de 2001. La semana pasada expusieron su situación a la Dirección General de Minas y anteayer a una representación de diputados del Parlament de Catalunya que, por unanimidad, pedirán la comparecencia de los consejeros de Industria y de Trabajo.
Un millar de personas asistieron ayer al funeral y entierro de José Luis Roldán de la Corte, que se celebró en la iglesia de Sallent.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 14 de junio de 2002