La fiebre del fútbol ha cubierto todos los rincones. En una prisión tailandesa, cerca de Bangkok, se ha organizado un campeonato entre los reclusos de Japón y Nigeria -los que se enfrentan en la foto ante la atenta mirada de un agente-, así como los de Francia, Alemania, Gran Bretaña, Italia, Estados Unidos y la propia Tailandia. El entusiasmo, desde luego, no falta.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 14 de junio de 2002