Dos chicas y un chico esperaban el pasado día 3 a L. M. M., una estudiante mulata de 17 años, adoptada por una familia española, a las puertas de su colegio en Pozuelo de Alarcón (Madrid). Las chicas la emprendieron a puñetazos con L., mientras que el chico, con el rostro oculto bajo un pasamontañas, le asestó un golpe en la espalda con un bate de béisbol. El ataque dejó a la agredida con un traumatismo craneal y daños en la dentadura. 'Eres una escoria. Das asco, negra de mierda', le increparon los atacantes, que, según ella, son uno de los grupos de cabezas rapadas que hay en el municipio.
'La xenofobia está detrás de la agresión a mi hija. La atacaron por el color de su piel, por ser mulata', afirma C.M.I., padre de la víctima, que ha denunciado la agresión a la policía y al Defensor del Menor. Ese día L. estrenaba horario de verano en el colegio. 'Salí sola por la puerta del colegio a la una y media para ir a casa', explica. 'Entonces vi a dos chicas que me abordaron y me preguntaron por mi hermano. Acto seguido, una de ellas me pegó un puñetazo y otra me agarró por la mochila y me tiró al suelo. Allí quedé medio inconsciente. Lo único que sé es que ya no oía nada', relata L. Cuando se recuperó, la agredida vio al encapuchado con el bate en la mano. 'Se puso detrás y entonces me dio el golpe en la espalda y volví a quedarme atontada'.
L. asegura: 'Desde hace años me insultan por el color de mi piel. En el colegio hasta me escupen'. Según la joven, éste pudo ser el origen de la agresión. 'Fui a hablar con la tutora del chico que me había escupido y yo creo que ahora se han vengado'.
Por otra parte, la tensión en Sant Vicenç de Castellet (Barcelona) a raíz de la brutal agresión a un magrebí y el incendio de la casa en la que vive con su familia y otros inmigrantes y la posterior detención de 13 jóvenes relacionados con los hechos ha ido en aumento en las últimas horas. Ayer durante la declaración de 10 de ellos se produjeron enfrentamientos verbales entre los familiares de los detenidos y un numero grupo de inmigrantes marroquíes que estaban en la puerta de los juzgados de Manresa. Joan Montsech, alcalde socialista de Sant Vicenç, fue también objeto de duras agresiones verbales de los familiares de los arrestados. Además, amigos de los detenidos han convocado para hoy una manifestación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 19 de junio de 2002