Los Mossos d'Esquadra detuvieron ayer a un menor de edad que presuntamente está relacionado con la agresión racista que se produjo el pasado fin de semana en Sant Vicenç de Castellet (Barcelona). Este menor se suma a las 13 detenciones que se han realizado por esta acción violenta. De los catorce, dos fueron puestos en libertad -uno con cargos y otro sin-, además de dos menores de edad que han pasado a disposición de la Fiscalá de Menores, y el resto que ya han ingresado en la prisión Modelo de Barcelona.
El alcalde de Sant Vicenç,Joan Montsech, manifestó después de más de una hora de reunión con representantes de los familiares de los detenidos, que 'hay una gente mayor que calienta la cabeza a estos jóvenes y los lleva por este camino de violencia gratuita'. 'Hay una coincidencia mutua, tanto por parte de los padres como por parte nuestra, de que hay que hacer alguna cosa para recuperar a estos jóvenes del camino de violencia que están siguiendo hasta ahora', añadió el edil. Joan Montsech también señaló que en Sant Vicenç 'el clima actual está produciendo una psicosis'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 20 de junio de 2002