Un comentario sobre la opinión vertida por el político Mariano Rajoy diciendo que la 'educación vasca es letal'. ¿Un vicepresidente español puede difamar a más de un millón de progenitores y familias vascas, que por lo visto acuden y envían a sus hijos a un servicio público letal? ¿Se puede ultrajar a más de 40.000 profesores y a medio millón de alumnos vascos?
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 21 de junio de 2002