Un incendio obligó a desalojar ayer tarde un bloque de 40 viviendas sito en el número 34 de la calle de Toledo (Centro). Las llamas, que comenzaron por causas aún no esclarecidas en el quinto piso, afectaron a la cubierta, lo que dificultó las tareas de extinción. Cinco personas sufrieron intoxicaciones leves por humo y crisis nerviosas, y fueron atendidas en el lugar del siniestro por el Samur-Protección Civil.
El fuego comenzó a las 19.45 y se propagó con rapidez por los pisos de la quinta planta. Al lugar acudieron nueve dotaciones y unos 40 efectivos de los bomberos del Ayuntamiento, que precisaron más de tres horas para extinguir completamente las llamas. 'Nos han llamado al telefonillo y nos han dicho que bajáramos porque había fuego. El desalojo ha sido muy tranquilo y sin incidentes', comentó un vecino del inmueble.
Los bomberos tuvieron que emplear una escala para controlar el fuego, que se propagó por la cubierta. Centraron su trabajo en parar el avance de las llamas, ya que por el tejado podían afectar a otros inmuebles colindantes, según el portavoz del Cuerpo, Delmiro Guntiñas. El Samur montó un puesto de atención médica y allí se ocupó de los cinco vecinos intoxicados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 28 de junio de 2002