La telefónica WorldCom y el fabricante de equipos para este sector Alcatel han dado un nuevo susto a los inversores. La primera, al contabilizar pérdidas como ganancias, ha puesto en entredicho la honradez de las grandes corporaciones apenas seis meses después del escándalo Enron.
En cuanto a Alcatel, ha anunciado 10.000 despidos a añadir a los 35.000 ya previstos para resistir la crisis. Mientras, Oracle, con una caída del beneficio del 15,4%, espera sobrevivir a la crisis de las telecomunicaciones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 30 de junio de 2002