El Gobierno no aumentará los impuestos indirectos (IVA) ni actualizará los especiales (los que gravan el alcohol, tabaco, matriculaciones, electricidad o hidrocarburos) en el año 2003, según aseguró ayer Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda.
La decisión de congelar los impuestos coincidirá con la entrada en vigor de la reforma del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y del IAE (Impuesto de Actividades Económicas), en 2003
Montoro vinculó la evolución en la recaudación de impuestos especiales en lo que va de año, con la creación de empleo y el incremento en el consumo para afirmar que 'existen indicios de recuperación económica en España'. De enero a mayo de 2002, el PIB creció un 0,85%, gracias al incremento en un 7,7% de la recaudación del IVA y de los impuestos especiales (4,5%). En total, la recaudación de los impuestos indirectos creció un 6,8%.
El ministro ratificó que la economía española crecerá un 2,4% este año y un 3% en 2003, por la 'recuperación de los mercados europeos', y que la evolución de las principales magnitudes permitirá una 'recaudación sostenida del IRPF, así como el mantenimiento de las rentas familiares'. Montoro reiteró que la supresión del IAE beneficiará al 90% de las empresas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 5 de julio de 2002