Un hombre fue detenido ayer después de circular a toda velocidad por las calles de Barcelona durante más 20 minutos, perseguido por agentes de la Guardia Urbana; dos de éstos resultaron heridos leves al intentar cerrarle el paso. Todo empezó a las 12.35 horas en el espigón de la Mar Bella. Una patrulla dio el alto a un turismo que circulaba por una zona para peatones restringida al tráfico rodado. Fuentes policiales informaron de que el conductor huyó velozmente y estuvo a punto de arrollar a varios peatones.
La persecución se desarrolló por el distrito de Sant Martí y finalizó, tras varios intentos por parte de los agentes de interceptar el vehículo, cuando el conductor se saltó un semáforo en rojo y chocó con otro vehículo. El fugitivo salió del coche corriendo y agredió a los agentes que intentaron detenerle, pese a que estaba herido.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de julio de 2002