Un grupo de proetarras arrojó en la noche del sábado varios huevos con pintura roja y amarilla sobre el monolito colocado en memoria de José Luis López de Lacalle, el columnista asesinado por ETA en mayo de 2000, en el parque de Andoain (Guipúzcoa) que lleva su nombre. Ediles socialistas de este municipio y simpatizantes del PSE celebraron ayer un acto de desagravio junto al monolito atacado por los violentos. El responsable de la agrupación local socialista de Andoain, Estanis Amutxastegi, pidió al lehendakari Ibarretxe que no pierda el tiempo en debates sobre la independencia y solucione la "falta de convivencia y tolerancia" en el País Vasco.
Un ataque similar se produjo el sábado por la noche en Pamplona, donde, en plenos sanfermines, unos encapuchados lanzaron pintura verde, amarilla y blanca contra la fachada del Ayuntamiento.
Por otro lado, cuatro menores detenidos por la Ertzaintza el viernes en San Sebastián, acusados de atacar una pizzería, y otros dos jóvenes arrestados en los incidentes ocurridos de madrugada en Rentería, durante el recibimiento a dos presos de ETA, quedaron ayer en libertad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 14 de julio de 2002