Varios miembros de la Asociación SOS Papá, formada por padres separados que piden la custodia compartida de sus hijos, intentaron ayer, frente al Congreso de los Diputados, quemarse a lo bonzo, protegidos con trajes ignífugos. La policía, que se encontraba en la plaza de las Cortes, impidió la protesta. Les retiró la gasolina y parte de los trajes, fundamentalmente capuchas y guantes que los concentrados llevaban para protegerse del fuego.
Los manifestantes, media docena de hombres y algunas mujeres, desplegaron una gran pancarta en la que se leía: 'Nuestros hijos maltratados y secuestrados impunemente por el Estado. Basta ya. Custodia compartida'.
El presidente de la asociación, Alejandro Urcera, explicó que los padres separados y con hijos son 'discriminados con sentencias que benefician siempre a las madres'. Los padres se quejan de que a sus hijos en un 98% de los casos se les aparta de la familia paterna y consideran que la patria potestad sólo sirve para dar el apellido y aportar dinero.
Urcera declaró que 'a los jueces les resulta más fácil, por tradición y para evitar sentencias polémicas, otorgar la custodia a las madres, sin tener en cuenta en muchas casos el bienestar o lo que es mejor para los hijos'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 28 de julio de 2002