El Departamento de Medio Ambiente no autorizará la construcción de una minicentral hidroeléctrica en el barranco del Besiberri, en Vilaller (Alta Ribagorça), porque en un futuro está previsto que el paraje quede incluido en el área de protección del parque nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, cuya ampliación en 3.000 metros cuadrados han solicitado los ayuntamientos de Vilaller, Sort, Torre de Capdella y Rialp.
La instalación hidroeléctrica promovida por una sociedad privada ha puesto en pie de guerra a la comarca al considerar que la actividad afectaría a la única zona virgen que queda en la cabecera del Besiberri, un caudaloso afluente del Noguera Ribagorçana, por lo que en caso de ser autorizada supondría 'un atentado ecológico de consecuencias irreversibles'. Los vecinos aseguran que el Pirineo ya ha pagado la cuota energética que le corresponde con la abundancia de pantanos y centrales construidos en la segunda mitad del pasado siglo y añaden que la cuenca del Ribagorçana es una de las más explotadas hidrológicamente.
La Generalitat se había mantenido en silencio hasta ahora pese a que los vecinos de la comarca llevaban meses organizando movilizaciones y recogiendo firmas contra el proyecto. El consejero Ramon Espadaler dijo el lunes que su departamento es partidario de ampliar el área de protección de Aigüestortes, lo que en su opinión hace inviable cualquier proyecto de construir una minicentral en Besiberri.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 31 de julio de 2002