La ONU, como parecía inevitable, extendió esta madrugada su misión en el Sahara Occidental hasta el 31 de enero del año próximo. El margen para buscar una solución al conflicto se alarga 6 meses más. La extensión se aprobó por unanimidad de los 15 miembros del Consejo de Seguridad. El texto final hace pensar que la ONU se inclina por la vía de la autodeterminación.
Al tiempo que se extiende la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sahara Occidental (MINURSO), el Consejo de Seguridad hizo un llamamiento público al Frente Polisario y al Gobierno de Marruecos para que cooperen con la iniciativa diplomática que trata de encontrar una vía de escape al enfrentamiento.
Según el Consejo de Seguridad, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, espera que las partes "trabajen de manera constructiva" en los próximos meses. En la resolución final, esta institución reconoce que "las diferencias entre ambas partes no permiten escoger" entre las opciones recomendadas en el informe que Annan redactó en febrero.
La misión en el Sahara Occidental se estableció en 1991 para tratar de aplicar un Plan de Arreglo que solucionara el conflicto a través de un referéndum; la consulta debería decidir si el territorio inicia los trámites hacia la independencia o si queda integrado en Marruecos. El Consejo reconoció anoche que nunca se han conseguido las condiciones mínimas para la celebración de ese referéndum.
Autodeterminación
Así las cosas, el Consejo recomienda volver a empezar: pide a Annan que su enviado para este conflicto, el diplomático James Baker, vuelva a trabajar "en la búsqueda de una solución política". Al mismo tiempo, el máximo órgano de Naciones Unidas muestra su disposición a "considerar cualquier aproximación que se encamine hacia la autodeterminación". Este matiz hace pensar que el Consejo descarta de momento que la solución pase por un estatuto de autonomía.
La resolución también pide a las partes colaboración para establecer "medidas de generación de confianza" y llama a la cooperación con el Comité Internacional de la Cruz Roja para investigar la suerte de las personas desaparecidas desde el comienzo de la confrontación. Finalmente, la ONU hace un llamamiento a la comunidad internacional para que "proporcione una ayuda generosa que permita superar la situación de falta de comida entre los refugiados". Pide a las partes que mantengan el compromiso de alto el fuego y se felicita por la liberación de más de 100 prisioneros de guerra marroquíes, aunque pide al Polisario que deje en libertad "sin más demora" a los presos que todavía permanecen en cautividad.
Ahora Kofi Annan tendrá un plazo relativamente amplio para presentar ante el Consejo de Seguridad un nuevo informe "con cualquier otra propuesta", al tiempo que pide también recomendaciones para reorganizar la misión en el Sahara Occidental.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 31 de julio de 2002