Los 'fibers' llenan las calles y playas con sus mochilas y camisetas para disfrutar tres días de música
Los fibers ya están en Benicàssim. El lunes se abrió el recinto de acampada para quienes han comprado uno de los 26.000 bonos que la organización del Festival Internacional de Benicàssim (FIB) ha puesto a la venta este año. En poco más de un día llegaron a este municipio del litoral castellonense 4.000 jóvenes dispuestos a disfrutar de la playa, la música y todas las actividades programadas. En las próximas horas llegará el grueso de los asistentes que invadirá con mochilas, pantalones cortos y camisetas las calles y playas. La pulsera identificativa, que todos lucirán, prescinde este año de colorido. Los bonos están agotados y las entradas de día empiezan a escasear, aunque todavía hay disponibles para los tres días de música.
Como recibimiento, esta tarde, a partir de las ocho y hasta las seis de la mañana, se celebrará la fiesta de bienvenida en el velódromo municipal, donde se celebró el primer FIB, con capacidad para 8.000 personas. Allí actuarán Aldo Linares, Maga, Octubre, Casino, Beachwood Sparks, Nada Surf, Télépopmusik, Los Chicharrons Dj's y The Hacker. A esas horas, muchos de los fibers habrán paseado ya por la segunda Ruta Artística del festival, que alguien trató de boicotear destrozando cinco de las siete esculturas que la componen. Sólo una de ellas ha quedado seriamente deteriorada, la obra de Cristina Calderón, una instalación que representa una nube suspendida en el aire y que la artista barcelonesa compuso atando con un cable de acero un globo de helio de 6,5 por 3,5 metros con unos pesos en el fondo del mar.
La inestabilidad meteorológica es una de las cosas que más preocupan a la organización. En cualquier caso, las previsiones apuntan una mejora para el fin de semana, con el fin de colaborar a lograr algo estimulante e inolvidable.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 1 de agosto de 2002