El líder antiglobalización francés José Bové, condenado por la destrucción de un McDonald's, salió ayer de la prisión de Villeneuve-Les-Maguelone, cerca de Montpellier, en el sur de Francia. Bové, que había mantenido una huelga de hambre en prisión, fue aclamado por varios cientos de personas.
El líder antiglobalización, que se declaró un 'prisionero político', ha sido liberado después de pasar 44 días en la cárcel tras ser sentenciado por haber participado en el asalto a un McDonald's en 1999 para protestar contra la 'comida basura'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 2 de agosto de 2002