Las dudas sobre la recuperación en Estados Unidos se incrementaron ayer tras conocerse que la tasa de desempleo del país se mantuvo en el 5,9% en julio y la mayor economía del mundo apenas creó 6.000 puestos de trabajo (diez veces menos de lo esperado) el mes pasado. El índice Dow Jones de la Bolsa de Nueva York reaccionó con una caída que llegaba al 2,46% a media sesión, mientras las bolsas europeas resistieron con subidas modestas.
El Ibex ganó un 0,65%, similar al alza de un 0,77% de Londres. París subió un 0,14%. Las bolsas estadounidenses, sin embargo, abrieron a la baja arrastradas por el débil dato del empleo en julio, que ha sido interpretado como otro indicio de que la reactivación ha perdido ímpetu en los últimos meses. La tasa de paro se mantuvo en el 5,9%, según el Departamento de Trabajo. La semana laboral pasó de 34,3 horas trabajadas en junio a 34 en julio, el nivel más bajo desde octubre, poco después de los atentados del 11 de septiembre.
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Otros dos informes contribuyeron ayer a aumentar la incertidumbre sobre la recuperación. Los pedidos industriales cayeron un 2,4% en junio, la mayor caída desde noviembre. No obstante, el consumo creció en junio un 0,5% tras estancarse en mayo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 3 de agosto de 2002