El presidente de Navarra, Miguel Sanz (UPN), llevará al Parlamento foral su reforma legislativa para prohibir que la ikurriña ondee en los ayuntamientos de esa comunidad, aun siendo consciente de que carece de la mayoría precisa para su aprobación. Sanz manifestó ayer en Berriozar (Navarra), donde asistió al homenaje a una víctima de ETA, que mantendrá sus intenciones por 'coherencia con el juramento de lealtad constitucional' que hizo cuando tomó posesión del cargo.
El ministro de Administraciones Públicas, Javier Arenas, respaldó ayer la iniciativa del Gobierno navarro, ya que, opina, respeta la foralidad y la Constitución.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 10 de agosto de 2002