Los socialistas valencianos han vuelto a reclamar al Consell una moratoria inmediata de construcciones en la costa porque entienden que el retraso en la tramitación de la Ley de Ordenación del Territorio (LOT) favorece los intereses de los especuladores. El anuncio, realizado hace ya dos años por Eduardo Zaplana, de poner en marcha la LOT disparó, a juicio del portavoz del PSPV en medio ambiente, Francesc Signes, las actuaciones en el litoral valenciano.
Los socialistas advierten que entre 1995 y 2001 la superficie destinada a viviendas ha aumentado en la Comunidad Valenciana un 14,5%, 'es decir, 3,2 puntos por encima de la media española'. Hecho que califican de 'burbuja inmobiliaria' que afecta sobre todo a la costa. Pero este espacio geográfico, a su juicio, ya está suficientemente invadido: 'Menos de 80 kilómetros de costa quedan libres de ocupación y tan sólo 11 siguen siendo vírgenes'.
Signes recuerda que ya presentaron en las Cortes Valencianas el pasado 8 de mayo una proposición no de ley, aún no tramitada, para que el Consell apruebe por decreto una medida que está prevista en la LOT. Se trata de la disposición transitoria cuarta de la norma, que establece como medida cautelar una prohibición de recalificar terrenos en la franja de 500 metros de la costa. El PSPV pretende que el decreto amplíe esa moratoria a los planes de actuación integrada (PAI), es decir, supendiendo los proyectos urbanísticos presentados sobre cientos de hectáreas de suelo de la costa ya clasificado como urbanizable, 'salvo en los casos que se encuentren ya en periodo de ejecución o estén de acuerdo con los criterios y estrategias urbanísticas y territoriales establecidos en el planeamiento vigente'.
Además, el PSPV calcula que en la Comunidad Valenciana hay 270.000 viviendas vacías, hecho que repercute en la constante escalada de precios. Y acusa al PP de no sólo no tomar medidas al respecto, sino de potenciar la construcción en la costa (con el retraso de la LOT) y en las zonas húmedas (con proyectos como la Ruta Azul, que implica urbanizar una veintena de kilómetros al norte de Valencia).
'Esta dinámica voraz, incontrolada en la mayoría de los casos y vendida a los intereses especulativos', advierten los socialistas, 'es la que está causando en nuestra comunidad la ocupación de suelos no aptos para urbanizar y que frecuentemente se inundan cuando llegan lluvias torrenciales, como sucedió hace pocos meses; es la que provoca las restricciones de electricidad en determinadas épocas del año; es la que genera unas necesidades hídricas que aumentan de forma exponencial y que ni las previsiones del trasvase de agua del Ebro van a poder atender'.
Para Signes no hay duda, el anuncio de Zaplana de moratoria fue 'un aviso para navegantes, pero un aviso para navegantes especuladores', que 'por desgracia' ya ha dado muchos resultados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 12 de agosto de 2002