El Ayuntamiento de Almonte (Huelva) ha asegurado en un comunicado que la manifestación organizada por la Asociación de Propietarios de Matalascañas para mañana jueves tiene un 'diáfano trasfondo electoral y segregacionista, muy lejos de la línea de diálogo siempre abierta por este Ayuntamiento'.
Desde el equipo de gobierno municipal socialista se acusa también a los tres grupos políticos que conforman la oposición -PP, IU y PA- de perjudicar la imagen de la playa de Matalascañas y atentar contra los intereses del municipio de Almonte al tener previsto apoyar y participar en la manifestación ciudadana.
Según el PSOE, mientras todos los ayuntamientos de la provincia onubense con espacio litoral trabajan para sacar adelante la temporada estival, Almonte se convierte en escaparate para la polémica merced a una oposición política que de forma equivocada 'se alinea con los propulsores de la manipulación y la distorsión'.
Los propietarios de Matalascañas critican que el alcalde de la localidad, el socialista Francisco Bella, desde hace un año se niega a recibirlos, mientras 'impone un plan circulatorio caótico y privatiza los pocos espacios públicos que existían en la urbanización para aparcamiento, aplicando encima unos precios más que abusivos'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de agosto de 2002