Varios operarios limpiaban ayer el fondo del estanque del Museo Guggeneheim de Bilbao, como muestra la fotografía, para dejarlo listo para su nueva función. Una vez vacío, limpio y seco, ese espacio lo ganará el público que acuda mañana al concierto estrella de la Aste Nagusia bilbaína: la actuación de Simple Minds. Se calcula que el recinto del Guggenheim acogerá a unas 20.000 personas. Más aficionados podrán seguirlo desde una pantalla gigante bajo el puente de La Salve.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 16 de agosto de 2002