Para frenar el avance de Linux: Initiative for Software Choice. Así se llama la campaña de la Asociación de la Industria Tecnológica y de los Ordenadores para convencer a los gobiernos de que se lo piensen dos veces antes de adoptar sistemas informáticos basados en software libre. Detrás de la asociación, empresas como Microsoft o Intel.
La campaña pide a los Estados que en los concursos no se tenga en cuenta si los programas son propietarios o no; y que la elección se base en méritos propios del software y no por pertenencia a una categoría.
Sobre la propuesta de ley que prohibiría a California la compra de software de cualquier compañía que no abra o licencie su código, el grupo dice que podría arruinar a muchas tecnológicas, eliminar 200.000 puesto de trabajo y restringir la libertad de elección.
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Varios gobiernos ya adoptan políticas que fomentan el uso de Linux en sus administraciones. Por ejemplo, Alemania y Francia. Incluso la Comisión Europea se ha sumado a la campaña; aunque más lejos va el Gobierno peruano: prepara una propuesta de ley que limitaría la compra de sistemas propietarios en la Administración.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 22 de agosto de 2002