Más de 7.000 abonados se quedaron ayer sin luz durante varias horas, la mayoría debido a la tormenta. La zona más afectada fue la provincia de Tarragona y los afectados fueron recuperando el servicio de forma interminente. En Barcelona, unos 1.400 abonados del Eixample se quedaron sin suministro eléctrico durante casi dos horas después de que unos operarios de una empresa constructora dañaran una línea de tensión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 23 de agosto de 2002