Aliviado por su cómoda victoria sobre el Legia de Varsovia (3-0) en la ida de la ronda previa de la Liga de Campeones, el Barcelona disputa hoy (21.15, TV-3), ante el Estrella Roja de Belgrado, su torneo, un Joan Gamper cada vez más devaluado y casi sin hueco en el calendario. El principal aliciente es que Louis van Gaal, sí alineará esta vez como titular a Riquelme, suplente en el debut en el Camp Nou ante el conjunto polaco y que necesitó apenas media hora para marcar un golazo. El técnico holandés justificó su apuesta por el argentino al afirmar que el Gamper es el trofeo de presentación ante la afición. "Por eso", añadió, "jugará también de salida Enke ".
La teoría, sin embargo, queda en entredicho porque el Barça ya debutó ante el Legia la semana pasada. El Gamper, antes un cuadrangular en el que el equipo se estrenaba ante su público, se ha convertido ahora en un trámite engorroso. En cualquier caso, Van Gaal se ha tomado el partido en serio porque sabe que la grada le escruta y no le perdonará el menor desliz. Ayer aguardó la llegada desde Budapest de los internacionales y ordenó un ensayo a puerta cerrada. El preparador, que no podrá contar con el lesionado Dani, dio descanso a Kluivert por jugar los 90 minutos con Holanda. Quizá es la mejor forma de presionar a la junta para que le contrate -se barajan los nombres de Tristán y Hasselbaink- otro delantero.
Abelardo, ahora en el Alavés; Sergi, en el Atlético; Reina, en el Villarreal, y Rivaldo, en el Milan, todos despedidos por deseo de Van Gaal, habían sido invitados para saltar al césped para recibir un homenaje, pero no estarán por los compromisos con sus clubes y se les irá agasajando, salvo Rivaldo, en los partidos de Liga.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 23 de agosto de 2002