RANIERO DE MÓNACO / EPA
La identidad de una ficción
Cuando naces, no eres nadie, lógicamente, pero un señor que se cree que es tu padre va y dice, por ejemplo: -Tú eres Salvador García Panadero. Es imposible que tú seas Salvador García Panadero o cualquier otro, acabas de llegar del limbo o de donde vengan los recién nacidos. No eres nadie, insistimos, pero la presión ambiental para que te conviertas en Salvador García Panadero es de tal calibre que, no nos pregunten ustedes cómo, acabas siendo Salvador García Panadero.