El Gobierno georgiano lanzó ayer una operación que calificó de 'anticriminal' en el desfiladero del Pankisi, zona limítrofe con la república rusa de Chechenia, según el Kremlin, han hallado refugio cientos de guerrilleros chechenos. Las fuerzas del Ministerio del Interior, apoyadas por millar y medio de soldados que han sido desplegados en la entrada del desfiladero, entraron en esa zona que hasta ahora ha estado prácticamente controlada por chechenos y grupos de delincuentes georgianos.
'Esta operación anticriminal persigue, ante todo, poner orden en el desfiladero del Pankisi y limpiarlo de delincuentes y, en caso de que los haya, también de terroristas', explicó ayer el presidente Edvard Shevardnadze en una intervención por la radio nacional.
Moscú ha exigido en numerosas ocasiones a Tbilisi que deje de dar refugio a los 'bandidos y terroristas', como el Kremlin califica a los separatistas chechenos, y ha amenazado con 'seguir el ejemplo de Israel' y 'golpear al enemigo' allí donde se esconde, para prevenir las incursiones periódicas de los rebeldes, siempre según los rusos, desde el Pankisi a Chechenia.
Las relaciones entre Georgia y Rusia han empeorado en los últimos tiempos debido a la situación en el Pankisi y a las acusaciones mutuas que intercambian ambos países. El viernes pasado los georgianos habían denunciado el bombardeo de su territorio por parte de aviones rusos, acción que Tbilisi calificó de 'agresión abierta' por parte del Kremlin. Éste, mientras tanto, negó el hecho, aunque la violación del espacio aéreo georgiano fue confirmado por observadores de la OSCE.
Las tropas georgianas tomaron ayer bajo control los principales caminos, pero no entraron en las localidades, limitándose a poner puestos militares en sus afueras.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 26 de agosto de 2002