Las bolsas europeas tuvieron ayer una sesión muy positiva, aunque no por ello exenta de sobresaltos. El acuerdo de la banca para mantener el crédito a Brasil animó la cotización de los valores bancarios españoles y sirvió de modelo para el conjunto del mercado. Las acciones de SAN ganaron el 6,72% y las de BBVA el 5,72% al cierre de la sesión.
El ambiente en el mercado era de relativo optimismo, hasta el punto de que los altibajos de Wall Street apenas torcieron el rumbo de la sesión, al menos para el sector bancario. En Estados Unidos se conoció el dato relativo a la confianza de los consumidores en agosto, con un descenso de casi cuatro puntos respecto del dato de julio. Esta caída es la tercera consecutiva y provocó un importante retroceso en la Bolsa, que pasó en pocos minutos de ganar 98 puntos a perder 79. El fuerte incremento en los pedidos de bienes duraderos de julio sirvió para equilibrar las fuerzas y a media sesión el Dow Jones bajaba el 0,26%, 23 puntos.
El Ibex 35 terminó la sesión con un avance del 2,59% y por encima de los 6.700 puntos, mientras que la Bolsa de Madrid subía el 2,13% y se acerca al nivel de los 700 puntos.
En conjunto, parece que en el mercado se continúa insistiendo en consolidar estos niveles, aunque no existe unanimidad a la hora de decidir si es por la proximidad del cierre mensual o porque el dinero empieza a tomar posiciones ante una previsible mejora de la situación económica. Según el Ministerio de Economía, el PIB español habría crecido a un ritmo del 2% en el segundo trimestre, exactamente igual que en el primero, lo que indicaría que, como en Alemania, la economía tiende a mantener un ritmo de crecimiento estable, pero sin llegar a la esperada recuperación.
La contratación en el Mercado Continuo fue de 1,119,11 millones de euros, más del doble que el día anterior.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 28 de agosto de 2002