El ministro israelí de Defensa, Benjamín Ben Eliezer, canceló ayer su reunión con el titular palestino de Interior, Abdel Razek al Yahiye, en protesta por la caída de un mortero en un jardín de infancia en la colonia de Gush Katif y "otros incidentes adicionales ocurridos en la franja de Gaza los últimos días", según un comunicado oficial. Sin embargo ayer, las víctimas fueron una palestina y sus dos hijos.
Ben Eliezer protestó también por un supuesto intento de contrabando de armas desde el mar por parte de los palestinos, que provocó el martes por la noche la intervención del Ejército israelí en el barrio de Sheik Ijlin, al sur de la ciudad de Gaza. Helicópteros de combate y patrulleras de la Armada abrieron fuego contra unos objetos sospechosos que flotaban cerca de la costa y que resultaron ser electrodomésticos que no contenían armas ni explosivos. Los tanques realizaron una segunda incursión ayer y cuatro palestinos resultaron muertos, entre ellos la citada madre y sus dos hijos, según Reuters.
Además, un civil palestino fue abatido por el Ejército en la franja de Gaza y otro murió por la explosión de un obús en el campo de refugiados de Yenín. Un tercero, acusado de colaborar con Israel, fue asesinado por activistas de Fatah en Cisjordania, según France Presse. Mientras, el Ejército israelí detuvo al jefe del movimiento Hamás en Hebrón, Abdel Khalek. Sin embargo, las fuerzas de seguridad palestinas volvieron a desplegarse por la franja de Gaza, lo que representa un paso adelante en la aplicación del acuerdo Gaza Primero.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 29 de agosto de 2002