El consejero de Medio Ambiente, Fernando Modrego, se comprometió ayer en L'Alfàs del Pi (Marina Baixa) a proteger la Serra Gelada, un 'pulmón natural' que comparte este municipio con el de Benidorm. La concejal de Medio Ambiente de Benidorm, Josefa Pérez, se mostró ayer satisfecha de esta iniciativa, al igual que representantes del Consistorio de L'Alfàs.
La fórmula de protección, que puede ser a través de la declaración de parque, paraje natural o paisaje protegido, está por determinar. El plan impedirá actividades que supongan una transformación radical del medio físico. La protección ideada por Medio Ambiente amparará también los islotes de Benidorm. En total, la superficie a preservar será de 444 hectáreas, además de los espacios marinos.
El programa de ordenación de Serra Gelada lleva aparejado la protección del medio marino en las bahías de Benidorm y Altea. Se persigue controlar los vertidos en dichas zonas y establecer medidas para evitar ataques a la pradera de posidonia, con un destacado valor ecológico. Las extracciones de toneladas de arena de la playa submarina de Serra Gelada, para regenerar otras, ha originado protestas de los grupos conservacionistas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 31 de agosto de 2002