Vitoria ha sido, y sigue siendo, ejemplo de urbanismo ordenado: las aceras e infraestructuras deben estar construídas antes que los edificios. En este polígono, la previsión se ha llevado al extremo. Se ha levantado el parque infantil antes de que haya casas, y niños.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 2 de septiembre de 2002