Antes de que termine el mes de octubre, previsiblemente el día 21, el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, será proclamado por su partido candidato a la presidencia del Gobierno en las elecciones de 2004. El proceso de designación de aspirantes será puesto en marcha el próximo viernes en el Comité Federal del partido, que convocará elecciones primarias, tras el acuerdo del presidente del PSOE, Manuel Chaves, con todos los secretarios generales de las federaciones. El PSOE quiere destacar que cuenta con un líder electoral mientras que el PP carece de candidato.
Durante la pasada semana, Manuel Chaves mantuvo conversaciones con todos los secretarios generales de las federaciones socialistas para conocer su opinión sobre la conveniencia de disponer pronto, a ser posible antes de que termine el próximo mes de octubre, de candidato a la presidencia del Gobierno, de cara a las elecciones legislativas de 2004.
A todos les pareció bien. Primero, porque en el PSOE no se duda de que el elegido será José Luis Rodríguez Zapatero, lo que contrasta con la total incertidumbre sobre quién será el candidato del PP y con el riesgo, a juicio de los socialistas, de que el proceso de elección provoque conflicto, o al menos "ruido", en las filas populares.
Además, los socialistas quieren aprovechar la unidad y cohesión de la que ahora gozan "como nunca", según enfatizó ayer el presidente del PSOE, Manuel Chaves, para poner en marcha su proceso democrático de designación de candidatos, que permite a los militantes participar en la elección de su aspirante a La Moncloa. "En nuestro partido todos elegimos a uno mientras que en otros uno elige a todos", comparó Chaves en tono de orgullo.
Tampoco en este partido se considera que la selección se hace con demasiado tiempo ya que cuando se produzca la nominación faltará año y medio para las elecciones generales en tanto que cuando el anterior secretario general, Joaquín Almunia, ideó este procedimiento y lo puso en marcha faltaban dos años para las elecciones.
En esa ocasión a Almunia le salió un competidor, José Borrell, que le ganó aunque un año después dimitió y la pelota volvió otra vez al tejado de Almunia por decisión de los barones del partido.
Aunque la elección de Zapatero se considera absolutamente segura, lo cierto es que en el PSOE no hay otra posibilidad actualmente de elegir a los candidatos, municipales, autonómicos y para la presidencia del Gobierno que no sea la de convocar primarias, según los artículos 40 al 50 de sus estatutos federales. Ahora bien, si no hay más que un candidato, obviamente, no hay competición y, por tanto, se procederá a la designación de quien se haya presentado, en este caso Zapatero.
Decisión del Comité Federal
El proceso empezó ayer, una vez que la Ejecutiva Federal aprobó por unanimidad la propuesta del presidente del partido, Manuel Chaves, de pedir al Comité Federal, que se reunirá el próximo viernes, que convoque elecciones primarias.
Todo el proceso terminará, como máximo, 45 días después de que el Comité Federal abra el proceso el próximo día 6. Si hay más de un candidato habrá campaña interna y votación en urna en todas las agrupaciones del PSOE. Todos los militantes, es decir, unas 230.000 personas, tienen derecho a voto.
La Ejecutiva y los dirigentes regionales tienen todavía que decidir cuál es el procedimiento que se seguirá para la presentación de Zapatero ya que las normas permiten tres vías: la firma de la mayoría de la Ejecutiva Federal; la de la mayoría del Comité Federal o la del 10% de los militantes (unos 23.000 socialistas).
La situación interna del PSOE, "de unidad y cohesión total, sin grietas, detrás de la Ejecutiva Federal y de José Luis Rodríguez Zapatero", según expresión de Manuel Chaves, permite cualquiera de las vías. Esa unidad hace pensar a miembros de la dirección socialista que "miles de militantes" avalarían con gran satisfacción la candidatura de Rodríguez Zapatero.
Aunque el calendario se decidirá esta semana y lo aprobará el Comité Federal, es muy probable que el día 21 de octubre sea el escogido para celebrar la reunión en la que el Comité Federal proclamaría a Zapatero -tras no presentarse rivales- candidato a presidente del Gobierno.
Pocos días después, el domingo 27 de octubre, el líder socialista, ya como aspirante a la presidencia, protagonizará en Madrid un acto multitudinario que conmemore la victoria electoral del PSOE el 28 de octubre de 1982. Zapatero asumirá ese legado y se presentará como el candidato que llevará de nuevo al PSOE a la victoria. "El ciclo del PP se acaba", declaró ayer Chaves.
Ya con Zapatero designado, el PSOE empezará otro proceso: la elaboración del programa electoral. Los socialistas pretenden involucrar a asociaciones, colectivos y ciudadanos en general que quieran aportar sugerencias.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 3 de septiembre de 2002