El partido Brasil-España, disputado en la madrugada del jueves, obtuvo una audiencia de 3.401.000 espectadores y una cuota de pantalla del 24,3%, lo que le convierte en el encuentro de la selección con mayor seguimiento en televisión. La única retransmisión de baloncesto que supera esa cuota de panatlla fue el quinto partido de la final de la Liga ACB del año 97, entre el Real Madrid y el Barcelona, que consiguió un share del 27,4%.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 6 de septiembre de 2002