Una de las ruedas del tren de aterrizaje delantero del avión de Air Europa que había realizado un vuelo Londres-Madrid reventó ayer poco después de las 17.55, cuando la nave se hallaba en una calle de rodadura del aeropuerto de Barajas, sin que se produjera ningún daño en la tripulación y en los 135 pasajeros. Según fuentes de la compañía, el avión, procedente del aeropuerto londinense de Gatwick, sufrió la explosión de uno de los dos neumáticos del tren delantero, tras lo cual reventó el otro al no poder soportar el peso del aparato, que ya transitaba por la calle de rodadura tras haber aterrizado. Inmediatamente acudió un camión de bomberos, cuyos efectivos lanzaron espuma carbónica sobre la pista y sobre el tren de aterrizaje para evitar un incendio en la aeronave.
Los pasajeros del avión fueron desembarcados sin ningún tipo de incidencia y trasladados en autobuses hacia una de las terminales del aeropuerto de Madrid. Posteriormente, personal de Air Europa desembarcó el equipaje de las bodegas del avión y lo depositó en una cinta transportadora para que lo recogieran los viajeros. Al lugar del accidente acudieron, además del retén de bomberos, personal de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) así como técnicos de Air Europa para realizar el cambio de los neumáticos y trasladar la aeronave a un aparcamiento.
Por otro lado, el Defendor del Pueblo ha abierto una investigación de oficio para que la seguridad de los pasajeros de líneas aéreas "quede garantizada en todo momento". El defendor alude a deficiencias en el control de los equipajes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 14 de septiembre de 2002