Lars Stjernkvist, de 44 años, periodista, diputado desde 1991 y secretario general del Partido Socialdemócrata sueco desde hace tres años, atendía en la mañana de ayer a los periodistas concediendo entrevistas sin parar. El entusiasmo por el éxito electoral ahuyentaba el cansancio de la noche anterior. 'Espero que nuestra victoria signifique mucho para Europa por dos razones: la primera, porque hemos demostrado que la izquierda puede ganar un alto porcentaje de votos todavía en este continente, y la segunda, porque creo que significa el comienzo de algo nuevo, un punto de inflexión en el avance de la derecha en los últimos meses. Creo que este cambio de tendencia puede confirmarse en las próximas elecciones alemanas y quizá también en Austria'.
¿Qué significa este triunfo para la adhesión de Suecia al euro? 'Es sin duda un paso adelante. Era necesario mantener la estabilidad para hacer la campaña del próximo referéndum a favor de la unión monetaria'. En cuanto a una eventual entrada de Suecia en la OTAN, el secretario general de los socialdemócratas suecos la descarta por completo. 'No vemos la razón para hacerlo cuando, además, la gente tampoco está convencida de sus ventajas. Creo que es nuestra responsabilidad no abandonar nuestra independencia'.
¿Independencia o aislamiento? 'Independencia. De criterios y de actuación. Pensamos que el hecho de que Suecia sea independiente en esta materia no sólo es buena para nuestro país, sino también para toda Europa'.
Lars Stjernkvist tiene muy claro que el triunfo del domingo demuestra que el Estado de bienestar, el modelo social sueco, está aún vigente. 'Sinceramente, creo que es la principal razón de nuestro éxito. La gente sabe que es la única manera de resolver los problemas mediante soluciones políticas y que mantener el Estado de bienestar tiene un precio, que es pagar impuestos. Por eso han fracasado los conservadores al insistir en pedir recortes fiscales. La gente sabe que no se pueden bajar los impuestos si quieren vivir con seguridad'. Sobre el problema de los inmigrantes, el secretario de los socialdemócratas suecos no está seguro de que este tema 'tenga un gran papel en el futuro de la política sueca'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 17 de septiembre de 2002