En el tramo final del partido y en apenas cinco minutos resolvió el Celta sus problemas con el gol, que amenazaban con enturbiar la eliminatoria frente al Odense de Dinamarca. Cuando el equipo de Lotina comenzaba a encomendarse a un difícil partido de vuelta emergió Catanha, inédito hasta ese momento, y poco después McCarthy, su sustituto, quienes encarrilaron la eliminatoria.
CELTA, 2; ODENSE, 0
Celta: Pinto; Velasco, Cáceres, Berizzo, Juanfran; Luccin, Vagner (J. Ignacio, m. 59); Jesuli (Edu, m. 72), Mostovoi, López; y Catanha (McCarthy, m. 72). Odense: Zaza; Slim, Hemmingsen (Hansen, m. 47), Sonksen, Derveld; Berg (Knudsen, m. 64), Pedersen, Tembo, Jorgensen (Johansen, m. 80); Sangild y Miti. Goles: 1-0. M. 70. Centro de Jesuli que remata Catanha. 2-0. M. 74. McCarthy, de cabeza, a centro de Gustavo López. Árbitro: Dan Tudor (Rumanía). Mostró tarjetas amarillas a Vagner, Slim y Sonksen. Unos 7.000 aficionados en Balaídos.
El Odense sólo opuso intimidación y fuerza física al fútbol del Celta, ligero pero sin pólvora durante demasiados minutos. Los daneses sólo disfrutaron de ocasiones de gol con las cesiones de Juanfran a Pinto, mientras que el equipo vigués lo intentó desde cualquier rincón del campo. Sin hacer un gran partido, el Celta, que no reservó a un solo titular, fue acumulando ocasiones, pero el guardamenta Zaza y los palos las frustraron. Tanto error hizo mella en el fútbol de la escuadra viguesa, que fue perdiendo eficacia. Entonces apareció Catanha, que no había dado señales de vida. Y como espoleado por la competencia, el surafricano McCarthy cumplió con sus obligaciones en cuanto puso un pie en el campo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 20 de septiembre de 2002