Diecisiete personas, entre ellas 10 presuntos rebeldes musulmanes, fueron abatidas este fin de semana en la Cachemira india, donde la violencia no deja de agudizarse al acercarse la segunda vuelta de las elecciones regionales, prevista para mañana.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 23 de septiembre de 2002