Algorta puede presumir de Puerto Viejo y barrio pesquero, pero para rememorar la vida en la Edad Media ha necesitado instalar un mercado medieval. La columna vertebral del pueblo ha sido reconvertida en zoco árabe y barrio sefardí y en ella han sido instalados los talleres de artesanos y los puestos de venta de cerámica y ungüentos. La fotografía muestra cómo los trovadores, músicos y actores ambientaron ayer el encuentro. En Vitoria también se puede ver este fin de semana otro mercado medieval, más verosímil en el marco del Casco Viejo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 29 de septiembre de 2002