El público que asistió ayer a la última etapa de la Vuelta a España se entretuvo en los alrededores del estadio Santiago Bernabéu con diversas actividades mientras aguardaba el paso de su ciclista favorito. Hubo castillos hinchables, escalada y un campeonato de monopatín acrobático.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 30 de septiembre de 2002