ETA seguirá actuando; se pondrá en grave riesgo el desarrollo económico del País Vasco y esta comunidad quedará apartada de la Unión Europea. Ésta es la síntesis del mensaje que el PSOE, y desde luego el PSE, explicará a la sociedad vasca para que conozca las consecuencias del proyecto expuesto por el presidente del Gobierno vasco, Juan José Ibarretxe, y que "ocultó" en su exposición del pasado viernes en la Cámara vasca, explicaron en la ejecutiva socialista.
Además, la dirección, por instrucciones del secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero, ha decidido que los miembros de la dirección, diputados y senadores tengan presencia constante en las casas del pueblo para dar aliento a sus compañeros y trasladar la solidaridad del resto de socialistas.
El portavoz parlamentario, Jesús Caldera, anunció ayer que él empezará la ronda con una visita la próxima semana a Bilbao. La siguiente la hará Rodríguez Zapatero.
La vía de la negociación estatutaria, con el traspaso de las transferencias pendientes, y todo lo que se derive del Estatuto es razonable para el PSOE, por lo que si el lehendakari volviera a las tesis de la legalidad el PSOE no pondría ni mucho menos el grito en el cielo, según señaló Caldera.
Por su parte, el presidente del PSOE y de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, aseguró que la iniciativa de Ibarretxe es "inmoral" por su contenido y por el momento en que se ha hecho, cuando "la mitad de los vascos no tienen libertad para expresarse".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 2 de octubre de 2002