J. L. G. M., el ertzaina que iba a ser juzgado ayer por matar a puñaladas en 1998 a su ex novia, Idoia Gil, en Bilbao, ingresará en un psiquiátrico por un máximo de 17 años. Es el pacto al que llegó su defensor, la acusación particular y la popular, que ejerce la asociación Clara Campoamor. El acuerdo fija que la muerte de Gil fue un asesinato, y no un homicidio como pretendía la defensa, aunque se le aplica una eximente completa por su esquizofrenia. El acusado debe indemnizar con 120.000 euros a la familia, un 25% ahora y el resto se descontará de su pensión de invalidez.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 2 de octubre de 2002