Un niño de 13 años resultó herido leve en la madrugada de ayer al desplomarse el techo de la habitación donde dormía. Los hechos tuvieron lugar en el número 7 de la plaza del Mercado, en el corazón del barrio de San Mateo, ubicado en pleno casco histórico de Jerez. El suceso provocó la intervención de los bomberos y la Policía Local.
En la casa, habitada por dos familias y con más de un siglo de vida, ya se produjo, 15 días atrás, otro desplome, aunque entonces no hubo que lamentar daños personales.
Los vecinos se quejaron ayer amargamente de las grietas y humedades que decoran cada rincón del edificio y solicitaron la intervención urgente de la Gerencia Municipal de Urbanismo. 'Pagamos más de 15.000 pesetas al mes', lamentaba un inquilino, 'yo estoy en paro y mi mujer, enferma. Así no podemos vivir'.
Se da la circunstancia de que la propietaria de la casa, María Bejarano, es la presidenta de la asociación de vecinos del casco histórico de San Mateo. Bejarano animó a sus inquilinos a buscar otra vivienda con el argumento de no tener dinero para acometer las reformas necesarias en el edificio siniestrado.
El Ayuntamiento de Jerez, que se ofreció a realojar a los afectados, presentará en unos días un plan de actuación para el casco antiguo de la ciudad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 3 de octubre de 2002