El diputado del PSC-CpC Joan Ferran exigió ayer al director general de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV), Vicenç Villatoro, 'explicaciones por los despidos' de las corresponsales de Catalunya Ràdio en América Central y Francia, Elisabet Sabartés y Montserrat Casals, respectivamente. En declaraciones a Europa Press, Ferran se mostró convencido de que ambos despidos tienen 'un trasfondo político' y aseguró que 'Villatoro deberá explicar qué hay detrás' de los mismos. En la misma línea se pronunció el pasado martes Jordi Menéndez, representante del PSC-CpC en el Consejo de Administración de la CCRTV, que trató el asunto. Menéndez dijo que los despidos responden a 'razones extraprofesionales'.
Joan Ferran criticó asimismo las 'anacrónicas y lamentables' condiciones económicas de los contratos de los corresponsales de la emisora de la Generalitat, 'desde el punto de vista de los derechos de los trabajadores'. 'Si estas condiciones llegan a los tribunales y se hacen públicas, la CCRTV pasará vergüenza por reconocer que ha estado fuera de la legalidad durante más de ocho años', añadió.
Sabartés y Casals se quedaron sin trabajo el pasado 30 de junio, después de que ambas periodistas se negaran a firmar un contrato cuyas cláusulas consideran inaceptables. Una de ellas señala, según explican ambas, que en caso de enfermedad dejarán de percibir sus emolumentos y la emisora no se compromete a su readmisión. Al ser dadas de baja, las corresponsales presentaron una demanda por despido improcedente, cuyo juicio se celebrará próximamente. Sabartés y Casals se sienten represaliadas por su actitud crítica con la dirección de la emisora y con las condiciones en las que deben desempeñar su labor. Sabartés criticó que no se le permitiera a principios de este año viajar a Argentina para cubrir la grave crisis que vivía ese país, y Casals escribió en junio de 2000 un artículo en EL PAÍS en el que lamentaba la degradación de Catalunya Ràdio como servicio público.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 3 de octubre de 2002