El Pleno del Congreso aprobó ayer el proyecto de Ley de IRPF, que aún debe pasar por el Senado y la vuelta al Congreso para su entrada en vigor en 2003. El PP y CiU introdujeron mejoras fiscales para los propietarios de pisos que alquilen sus viviendas. El PP estudia retocar las condiciones de las Sicav para que se beneficien de la supresión del peaje fiscal.
Los nacionalistas catalanes quieren que, además, se favorezca a los promotores de pisos destinados al arrendamiento. La ventaja consistiría en la exención fiscal casi completa de los beneficios generados por esta actividad, y se incluiría como una enmienda en el Senado.
En el trámite de ayer, el PP aceptó otra enmienda de CiU en la que se extiende a la adopción y acogimiento, tanto preadoptivo como permanente, la deducción o paga de 1.200 euros para madres que trabajan fuera de casa y tienen niños menores de tres años. Otra enmienda pactada con Coalición Canaria se refiere a las inversiones en que se materializan las pólizas de seguros.
Desde la oposición, el PSOE centró sus críticas en que los nuevos beneficios fiscales para el alquiler de viviendas favorecen a los caseros y no a los inquilinos. También mostró su rechazo al nuevo tratamiento de las opciones sobre acciones, porque van a desfiscalizar buena parte de las retribuciones de los directivos de las empresas.
Insistió, igual que el PNV, en que la rebaja del IRPF (3.000 millones de euros) se limita a restituir lo cobrado de más desde 1999 por la no actualización de la tarifa y las deducciones.
El PP se quedó solo en la votación contraria a una enmienda del PSOE, similar a otras dos de CiU e Iniciativa per Catalunya, que pretendía declarar exentas del IRPF las indemnizaciones a presos políticos durante la dictadura franquista y que pagan algunas comunidades autónomas.
En cuanto a las reformas que pueden abordar en el Senado, el PP estudia retocar las condiciones impuestas a las sociedades de inversión de capital variable (Sicav). Estas socieades se benefician de la supresión del peaje fiscal que ahora se ha establecido para los cambios de fondos de inversión. Precisamente ayer el PP introdujo un enmienda que aclaraba que los unit linked (seguros que invierten en fondos de inversión) también se verán beneficiados de la supresión de peaje fiscal.
En el debate parlamentario, Josep Sánchez Llibre, portavoz de CiU, apoyó los argumentos del PP, valoró globalmente de forma positiva la reforma y expresó su satisfacción por las cerca de 25 enmiendas pactadas con los populares.
Frente a esta consideraciones, el portavoz de Presupuestos del PSOE, Francisco Fernández Marugán, lamentó que la reforma del IRPF "amplíe, ahonde e incremente" la técnica de la reducción fiscal para determinados tipos de renta y que está profundizando en la desfiscalización del sistema.
A su juicio, el PP está situando a las rentas del capital en un modelo de fiscalidad "mínima o blanda" mientras las del trabajo sufren el "drenaje fiscal", en lo que calificó de "fiscalidad haitiana". Marugán insistió en que "el PP legaliza la deserción tributaria" para un tipo de contribuyentes.
Por su lado, Francisco Frutos, portavoz de Izquierda Unida ( IU), lamentó que el PP vaya "sobrado" y desprecie las aportaciones de los distintos grupos parlamentarios, excepto las de CiU, en la misma línea "conservadora".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 4 de octubre de 2002