Una veintena de hinchas radicales béticos lanzaron ayer dos vallas contra una puerta de cristales del estadio Sánchez Pizjuán, sin que se produjeran daños. Fue mientras los aficionados sacaban entradas para el Sevilla-Betis de mañana, declarado de alto riesgo tras los incidentes de la temporada pasada en el mismo derby.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 5 de octubre de 2002