La renta variable europea ha cerrado otra vez en negativo en un entorno de elevada volatilidad. La falta de noticias positivas, tanto en el terreno empresarial como macroeconómico, ha provocado cesiones que, en el caso de EuroStoxx 50, han alcanzado el 5%. Sólo los defensivos, junto con el sector energético (que continúa beneficiándose del elevado precio del brent) han mostrado un mejor comportamiento relativo. En sentido contrario, tecnología (-8%) continúa aumentando sus pérdidas. Las fuertes cesiones han situado a los valores en unos niveles de rentabilidad por dividendo muy elevados como es el caso de Aegon o ABN Amro en Europa, que superan el 7%.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 6 de octubre de 2002