Este año hay setas en todo el Pirineo. Tantas, que en una mañana se puede llenar un cesto con 25 kilos de rovellons y llenegues. Y en tres días, uno con 75 kilos como el que le valió a Miguel Martín, de Berga, el primer premio del concurso Boletaire de Berga, que se celebró ayer en el Pla Puigventós (Berguedà). La fiesta del Bolet de Berga reunió entre 6.000 y 7.000 personas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 7 de octubre de 2002