Las autoridades de Finlandia investigan la muerte por envenenamiento de unos 50. 000 zorros azules y miles de visones en unas 50 granjas situadas en las proximidades del mar Báltico. Los restos de los animales, con sus valiosas pieles, han ido a parar a fosas comunes. En un principio se creyó que se trataba de un nuevo sabotaje del Frente de Liberación de los Animales, organización que viene hostigando a los granjeros por abastecer una industria que consideran "inmoral" y que ha convertido a Finlandia en el primer productor del mundo de pieles de zorro. Sin embargo, los primeros análisis señalan como probable causa de las muertes de los animales la ingestión de pienso contaminado con botulina, una neurotoxina que afecta al sistema nervioso.
"Todo parece indicar que se trata de bacilos tóxicos, que producen botulismo, y que para este tipo de animales es simplemente mortal", declaró ayer la jefa del departamento de patología del Instituto de investigación alimentaria y veterinaria del Ministerio de agricultura y forestación, Marjukka Anttila. Los proveedores de pienso se apresuraron a rechazar todo tipo de responsabilidades.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de octubre de 2002