Una nube tóxica originada por un error en la manipulación de productos químicos en la planta potabilizadora de Riudarenes (Selva) obligó ayer por la mañana a los vecinos próximos a la instalación a recluirse y cerrar puertas y ventanas durante una hora. Los Mossos d'Esquadra cortaron también el tráfico por una carretera cercana.
El vertido no afectó finalmente a la población y sólo el conductor del camión, Jaume O. A., de 51 años, que manipuló los líquidos tóxicos, fue trasladado al hospital Josep Trueta de Girona, pero su estado no reviste gravedad.
El incidente se produjo hacia las nueve de la mañana, cuando el conductor del camión, que transportaba policloruro de aluminio, una sustancia que se utiliza para eliminar el óxido, se equivocó de contenedor y lo vació en un recipiente con cloro.
La mezcla originó una nube tóxica que rápidamente se extendió por las inmediaciones del recinto. Los Bomberos de la Generalitat desplazaron tres vehículos y, provistos de máscaras, consiguieron cerrar el recipiente.
Mientras se realizaban estas operaciones, se requirió a la población que no saliera de sus casas y cerrara puertas y ventanas. La medida afectó también a la escuela y la guardería. El consistorio decidió que los alumnos no abandonaran las clases ni salieran al patio. En poco más de media hora se pudo controlar la situación. La nube tóxica se desplazó hacia una zona deshabitada en la que no entrañaba peligro y allí acabó por disiparse.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de octubre de 2002